Desde SUTEBA denunciamos la gravísima la situación que atraviesa la provincia de Buenos Aires por la utilización de agrotóxicos con alto impacto y severas consecuencias en lxs ciudadanxs y medio ambiente.
La muerte de la compañera Ana Zabaloy, luchadora incansable contra las fumigaciones sobre las Escuelas, es un punto de inflexión que da cuenta que la fumigación con agrotóxicos genera enfermedades crónicas, irreversibles y mortales.
Como SUTEBA, junto a la CTA Provincia de Buenos Aires, realizamos campañas y jornadas de difusión desde hace tiempo en varios puntos de la Provincia para expresar nuestro rechazo a la fumigación con agrotóxicos en general y aérea en particular. El monocultivo de la soja y la manipulación de semillas transgénicas son una nueva vuelta de tuerca del capitalismo multinacional en todo el mundo, en especial en Argentina. Ya no se necesitan investigaciones de impacto sanitario de las fumigaciones porque se sabe que provocan enfermedades respiratorias, dermatológicas, hematológicas y cánceres de todo tipo. Lo que se necesita es un cambio radical con cultivos ecológicos donde se promuevan las prácticas cuidando el medio ambiente y a las personas.
La Secretaria de Salud Laboral de la CTA Provincia de Buenos Aires, Lilian Capone, sostuvo: "El punto crítico en Buenos Aires se dio cuando el Ministro de Agroindustria, Leonardo Sarquís, ingeniero agrónomo y ex gerente de Monsanto, publicó una Resolución firmada por la Gobernadora Vidal donde se autorizaba la fumigación aérea cercana a las Escuelas. Junto a las Organizaciones ambientalistas, lxs Trabajadorxs denunciamos la impunidad que otorgaba esta medida ilegal, ya que la Constitución Provincial sostiene que no se puede atentar contra la concepción psicofísica de ningunx de sus habitantes. Obviamente, nadie puede discutir si es bueno o malo fumigar por encima de niñxs, jóvenes y adultxs. Y ante los reclamos multisectoriales, esta Resolución se modificó rápidamente, pero nunca fue anulada, por lo que la lucha continúa".
Desde SUTEBA lamentamos otra muerte y no queremos contar más, queremos un lugar de vida digna y segura, donde lxs chicxs y lxs Docentes puedan estar tranquilxs en la Escuela. Es increíble que a pesar de la prohibición se siga fumigando. No queremos que fumiguen indiscriminadamente, hay formas sustentables de control de las plagas. Solo es cuestión de que se implementen políticas donde se incluyan la salud y el medio ambiente como eje fundamental y no la renta y el mercado financiero.
A su vez, Capone expresó: "Debe haber un registro provincial de lxs Trabajadorxs rurales (la mayoría son familias sin trabajo registrado) y de todxs los que fumigan, con qué sustancias y cómo lo hacen. Tiene que haber un cambio inmediato de conducta en el cultivo, se tienen que prohibir las fumigaciones aéreas de cualquier tipo con un control de plagas estudiado. Es simple, se está en la vereda de las multinacionales que quieren ganar más dinero a costa de nuestra salud o se está en la vereda de lxs ciudadanxs y del Pueblo luchando colectivamente por una vida más digna".
¡POR ESCUELAS SEGURAS!
¡NO A LAS FUMIGACIONES, RESPETEN LA VIDA!