En el día de hoy recordamos al
gran maestro Alfredo Bravo, partícipe de la fundación de la
Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina
(CTERA) y uno de los referentes más valiosos que supo tener la central
sindical.
Recordamos a Alfredo y lo ubicamos en aquel convulso
1973, cuando logra articular la demorada unidad de los gremios docentes y
funda, junto a otros compañeros, la CTERA. Se trata, también, de
restituirlo al presente pensando en aquellos días en que la certeza del
golpe ensombrecía el horizonte y eso lo llevó a construir esa trinchera
de los derechos humanos que es la APDH (Asamblea Permanente por los Derechos Humanos).
En el undécimo
aniversario de su desaparición física, desde aquí queremos homenajear y
mantener vivo el recuerdo de un maestro comprometido con el destino de
los alumnos, con la Educación Pública y con su pueblo.
Comprometido
como Trabajador de la Educación y un incansable militante de los
derechos humanos que, luego de haber sufrido en carne propia las
vejaciones del terrorismo de Estado, se preocupó y luchó no sólo con la
denuncia sino con la reparación y castigo de los crímenes de la última
dictadura cívico-militar.
Desde el SUTEBA, nuestro humilde
homenaje y porqué el trabajo de Alfredo Bravo nos impulsa con su ejemplo
a mantener firmes nuestras convicciones y luchar por nuestros
objetivos.