Entre el 18 y el 20 de agosto el SUTEBA convocó a reuniones de Delegadxs en todos los distritos de la provincia de Buenos Aires, con el objetivo de debatir y realizar aportes para una Educación que nos prepare para un futuro mejor.
En Alte. Brown la reunión se llevó a cabo el viernes 20 de agosto a las 18 horas por plataforma zoom.
El SUTEBA puso en marcha sus mecanismos de participación democrática para debatir "la escuela que queremos". Los 35 años de historia de nuestro Sindicato, el centenario del natalicio de Paulo Freire, las consecuencias de cuatro años de neoliberalismo y las secuelas de una pandemia que aún no terminó, sirvieron de marco para un debate necesario.
Para entender la importancia de la primera etapa de esta iniciativa, conversamos con María Laura Torre, Secretaria General Adjunta del SUTEBA.
¿Cuál es la importancia del debate que se está planteando en relación a la Escuela que queremos?
En el Plenario de Secretarixs Generales que tuvimos la semana pasada, por unanimidad planteamos la importancia de dar un fuerte debate en todos los distritos de la provincia de Buenos Aires con respecto a cómo alcanzar, desde la Escuela que tenemos, la Escuela que queremos.
Y dar el debate implica la participación no solo de todos los delegados y delegadas, sino también de las y los docentes en la Escuela y también de nuestrxs estudiantes y de la comunidad educativa. Un debate abierto que incluye todas las voces.
Comenzamos el miércoles y hoy, viernes, ya estamos terminando la primera etapa. Y esta iniciativa se enmarcó en los 35 años del SUTEBA, que tiene un ADN relacionado con la conquista de derechos para nuestros compañeros y compañeras y con la defensa integral de la Escuela pública.
Y en el marco de los 100 años del natalicio de Paulo Freire, preguntarnos qué Escuela queremos implica un desafío y una épica que tienen que ver con el momento, porque venimos de cuatro años de gobierno de Macri y Vidal, quizás los más devastadores que tuvimos con respecto al desfinanciamiento educativo, con una perspectiva muy fuerte de mercantilización de la educación y con una retirada del Estado de las políticas públicas.
Por ejemplo, si no hubiesen discontinuado el programa Conectar Igualdad, la pandemia nos hubiese encontrado en mejores condiciones. Por eso es un momento muy propicio para abrir fuertemente el debate.
¿Cómo se estuvieron dando los debates en estos primeros días?
Los debates fueron muy ricos, sobre todo porque partimos de la escuela que tenemos, entonces hay un diagnóstico que ya está realizado. Pero hay un nuevo diagnóstico, que tiene que ver con lo vivido en la pandemia. Y en este diagnóstico, un valor muy importante que se vuelve a poner sobre la mesa es de qué trabajamos los y las docentes. Yo creo que a nadie le queda duda que ser maestro, maestra, profe, es una tarea muy difícil. Y esto se puso en valor también en los debates de nuestros cuerpos de delegados. Y también se planteó que el valor de nuestro trabajo docente tiene que ver con muchas variables, aparte del salario, obviamente, que es parte del debate que estamos transitando. Tiene que ver con los tiempos, con las complejidades, pero aparece ahora también la cuestión de los nuevos puestos de trabajo que se necesitan porque estamos pensando una nueva Escuela, entonces aparece la necesidad de pensar en nuevos puestos de trabajo en cada uno de los niveles y modalidades.
Se habló también sobre la necesidad de pensar una infraestructura diferente, así como de profundizar la participación de los estudiantes, y hubo dos temas que surgieron con mucha fuerza: la ESI y todas las cuestiones vinculadas con el ambiente dentro de nuestros diseños curriculares.
El debate fue muy importante, fue un punto de partida con mucha fuerza en cada uno de nuestros distritos, con muchas ganas de poder pensar la escuela que queremos, y de hacerlo colectivamente.
Es un debate que enriquece a la comunidad educativa, e incluso al Estado…
Así es. Este fue el punto de partida, vamos a seguir discutiendo durante todo el mes de septiembre. Obviamente que le vamos a plantear a la Dirección General de Escuelas cuál es la agenda de los trabajadores y las trabajadoras de la educación, pero al mismo tiempo esto va a ser parte de la mirada hacia adelante de nuestra política gremial pensando en el 2022. Esta agenda va a ser presentada con mucha fuerza, con la fuerza que da el debate colectivo, que no es patrimonio de un grupo sino de todos las y los docentes de la provincia de Buenos Aires, incorporando a la comunidad educativa.
El SUTEBA puso en marcha sus mecanismos de participación democrática para debatir "la escuela que queremos". Los 35 años de historia de nuestro Sindicato, el centenario del natalicio de Paulo Freire, las consecuencias de cuatro años de neoliberalismo y las secuelas de una pandemia que aún no terminó, sirvieron de marco para un debate necesario.
Para entender la importancia de la primera etapa de esta iniciativa, conversamos con María Laura Torre, Secretaria General Adjunta del SUTEBA.
¿Cuál es la importancia del debate que se está planteando en relación a la Escuela que queremos?
En el Plenario de Secretarixs Generales que tuvimos la semana pasada, por unanimidad planteamos la importancia de dar un fuerte debate en todos los distritos de la provincia de Buenos Aires con respecto a cómo alcanzar, desde la Escuela que tenemos, la Escuela que queremos.
Y dar el debate implica la participación no solo de todos los delegados y delegadas, sino también de las y los docentes en la Escuela y también de nuestrxs estudiantes y de la comunidad educativa. Un debate abierto que incluye todas las voces.
Comenzamos el miércoles y hoy, viernes, ya estamos terminando la primera etapa. Y esta iniciativa se enmarcó en los 35 años del SUTEBA, que tiene un ADN relacionado con la conquista de derechos para nuestros compañeros y compañeras y con la defensa integral de la Escuela pública.
Y en el marco de los 100 años del natalicio de Paulo Freire, preguntarnos qué Escuela queremos implica un desafío y una épica que tienen que ver con el momento, porque venimos de cuatro años de gobierno de Macri y Vidal, quizás los más devastadores que tuvimos con respecto al desfinanciamiento educativo, con una perspectiva muy fuerte de mercantilización de la educación y con una retirada del Estado de las políticas públicas.
Por ejemplo, si no hubiesen discontinuado el programa Conectar Igualdad, la pandemia nos hubiese encontrado en mejores condiciones. Por eso es un momento muy propicio para abrir fuertemente el debate.
¿Cómo se estuvieron dando los debates en estos primeros días?
Los debates fueron muy ricos, sobre todo porque partimos de la escuela que tenemos, entonces hay un diagnóstico que ya está realizado. Pero hay un nuevo diagnóstico, que tiene que ver con lo vivido en la pandemia. Y en este diagnóstico, un valor muy importante que se vuelve a poner sobre la mesa es de qué trabajamos los y las docentes. Yo creo que a nadie le queda duda que ser maestro, maestra, profe, es una tarea muy difícil. Y esto se puso en valor también en los debates de nuestros cuerpos de delegados. Y también se planteó que el valor de nuestro trabajo docente tiene que ver con muchas variables, aparte del salario, obviamente, que es parte del debate que estamos transitando. Tiene que ver con los tiempos, con las complejidades, pero aparece ahora también la cuestión de los nuevos puestos de trabajo que se necesitan porque estamos pensando una nueva Escuela, entonces aparece la necesidad de pensar en nuevos puestos de trabajo en cada uno de los niveles y modalidades.
Se habló también sobre la necesidad de pensar una infraestructura diferente, así como de profundizar la participación de los estudiantes, y hubo dos temas que surgieron con mucha fuerza: la ESI y todas las cuestiones vinculadas con el ambiente dentro de nuestros diseños curriculares.
El debate fue muy importante, fue un punto de partida con mucha fuerza en cada uno de nuestros distritos, con muchas ganas de poder pensar la escuela que queremos, y de hacerlo colectivamente.
Es un debate que enriquece a la comunidad educativa, e incluso al Estado…
Así es. Este fue el punto de partida, vamos a seguir discutiendo durante todo el mes de septiembre. Obviamente que le vamos a plantear a la Dirección General de Escuelas cuál es la agenda de los trabajadores y las trabajadoras de la educación, pero al mismo tiempo esto va a ser parte de la mirada hacia adelante de nuestra política gremial pensando en el 2022. Esta agenda va a ser presentada con mucha fuerza, con la fuerza que da el debate colectivo, que no es patrimonio de un grupo sino de todos las y los docentes de la provincia de Buenos Aires, incorporando a la comunidad educativa.